Esta es mi amiga Mariana Nastri, mi hermana de letras argentina. Ella es parte del premio que gané en el II Certamen de Escritura Scream "Cielo Abierto". Hoy quiero dedicarle un espacio en mi blog porque nuestra amistad traspasa océanos y fornteras y ayer mismo hablamos por teléfono. Pero os cuento desde el principio.
Para alguien como yo que sueña con ser escritora y que cuando empezó no tenía ningún tipo de contacto o padrinos en el mundo de los libros es difícil aspirar a hacer realidad ese sueño. Alguien que, para más INRI, vive en un pueblecito de Tarragona donde la actividad literaria no va demasiado lejos de sus fronteras (con todos mis respetos). Si a eso se le añade un bebé y pocos medios económicos, lo único que puede hacer que el sueño respire es una conexión a internet y mucha imaginación. Imaginación no sólo para inventar historias sino también para conseguir abrir alguna puerta sólo con esa conexión y un viejo portátil.
Concursos, mails, un blog... cualquier cosa es buena si se hace un buen uso de ella. Todo puede beneficiar y darle alas al sueño. Gracias a mi suscripción a Letralia (www.letralia.com) y a la excelente labor de su editor Jorge Gómez Jiménez, voy recibiendo en mi correo electrónico cientos de convocatorias a diferentes concursos literarios. Los que admiten envíos por mail son los más socorridos, para qué engañarnos, y tres de los cuatro que he ganado fueron por este medio.
Pues bien, cuando gané por primera vez el Scream estuve hasta el mes de septiembre sin saber nada de nada de ellos (este año a finales de junio ya tenía el premio en mis manos) y me empecé a impacientar (el fallo había sido el 12 de junio). Así que se me ocurrió enviar un mail a todas las direcciones que aparecían en el mail que desde la organización me habían enviado para comunicar el fallo con la esperanza de que el ganador de la categoría infantil supiera algo. Entre la gente que respondió a mi mail estaba Mariana.
Charlatanas como somos las dos no hizo falta demasiado para que una cosa llevase a la otra y el envío de mails entre nosotras se convirtiera en una cosa normal. En ellos compartimos inquietudes, hablamos de nuestros pequeños triunfos, de nuestros hijos, de como van las cosas en nuestros respecivos países... de todo un poco.
También hemos hablado en dos ocasiones por teléfono. Mariana tuvo el maravilloso detalle de llamarme el día después de la presentación de mi novela para felicitarme y saber cómo había salido todo. Ayer me volvió a llamar para saber más de cómo me había ido de nuevo con el III Scream. Charlamos, nos reímos...
Mariana es el gran premio del II Certamen de Escritura Scream "Cielo Abierto". Hay quien se queda con la anécdota. Hay quien sólo deja que le cuelguen la medalla y presume de concurso. Todo eso está muy bien pero hay quien desea ir más allá y utiliza los concursos para sacar mucho más partido de ellos. Conocer gente, participar en otras cosas derivadas de ellos, ganar amigos... Las cosas nunca son buenas o malas en sí mismas sino que dependen del uso que hagamos de ellas.
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