miércoles, 1 de abril de 2009

HUMILDAD


El mundo está lleno de engreídos altaneros. El de los escritores no iba a ser menos. Muchos de los que escriben se creen artistas, hablan de carrera y no de oficio o profesión. Y cuanto más mindundis más ínfulas.En este caminito de fondo que voy andando he encontrado de todo. Grandes que practican la modestia e insignificantes que desconocen la existencia de la humildad. Ser humilde es una actitud frente a la vida. Hay quien la practica y hay quien se encumbra aunque sus méritos sean escasos y no tenga en vistas que lleguen a más. Conozco a más de un escritorzuelo o escritorzuela que van de grandes divos. Presumen de ser buenos escritores porque han leído mucho. Se llenan la boca con lo que los demás les han dicho de sus escritos y, no sólo eso, sino que encima desmerecen e infravaloran a los demás. Que García-Márquez me venga a dar lecciones de cómo escribir, lo acepto (además encantada). Que Isabel Allende piense que lo que he conseguido escribiendo es poca cosa, es normal, no se lo tendré en cuenta. Que Jordi Sierra me considere insignificante como escritora, sería lógico. Pero no lo harán. Ellos saben de su grandeza y esa grandeza radica también en reconocer su propia pequeñez. No les hace falta hacerme de menos para creerse más. Que un escritor que no ha publicado nada en su vida ni tiene en vistas hacerlo me diga que he publicado mal, me asombra. Que alguien que escribe porque ha leído mucho ponga en cuestión la profesionalidad de quien lleva desde los 18 ganándose la vida gracias a lo que escribe, me parece un poco osado. Que uno que se dice escritor de a corregir sus obras al primero que se lo ofrece sin pedirle credenciales, me sugiere inseguridad. Que alguien tire por tierra mis logros pero que luego se apunte al carro para sacar partido de ellos, me molesta. Todo junto me produce tristeza.Y llegados a este punto, la decepción. Quemo mis naves y regreso a mi hogar. No necesito demostrar que soy escritora, no me hace falta “ir” de escritora… No quiero engordar mi ego pero tampoco estoy dispuesta a que me lo pisoteen. Sólo quiero escribir. Tampoco quiero que me utilicen como blanco de frustraciones, como chivo expiatorio de carencias y ambiciones no cumplidas, de deseos truncados... Acepto a los engreídos y pedantes, practico la tolerancia, pero no a los que me hunden en el fango para creerse mejores que yo. Gracias a quien haya que darlas por haberme enseñado el significado de la palabra humildad.La Bruja, dixit.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

No sé que te ha pasado exactamente pero puedes contar conmigo ya lo sabes.
Yo no soy escritor ni me considero escritor, sólo soy alguien que habla de libros y a mí el tuyo me pareció muy bueno. La reseña que hice de tu libro algunos me han dicho que es muy bonito y a mí me hizo mucha ilusión leerlo, escribirlo y entrevistarte luego.
Me han hecho un cable grande cuando lo necesitaba y encima lo estás disfrutando y parece que el favor te lo he hecho yo a ti.
Por eso para mí tu eres la mejor y por eso eres más amiga que muchos que se lo creen y no lo son tanto porque no encuentro el apoyo que necesito como lo he encontrado en ti.

Ya sabes dónde estoy, vale.

Besitos
gordos
josephb

Unknown dijo...

La envidia es muy mala. Los que quieren llegar y no pueden, intentan que los que lo hacen no disfruten de sus logros, colocan zancadillas siempre que pueden, rebajan y dicen que los que tienen éxito no son merecedores de los frutos conseguidos.
Sin trampa ni cartón, tú has conseguido un premio, has sido la mejor de entre cerca de doscientas novelas, que se chinche quién no pueda digerirlo. Tú has sido participante, finalista y vencedora. Puede que no tengas tu novela en el escaparate de una librería ¿y qué? Te la han publicado, tú la tienes, yo la tengo, la mayoría de tus amigos la tienen, la tienen gente que ni siquiera conoces, incluso has rebasado frontera. Eso, querida amiga, es mucho, más de lo que habías imaginado ¿o me equivoco? Has conseguido tu sueño, y estoy convencida que “La hija del escriba” estará en el escaparate de todas las librerías.
Por lo tanto, sigue escribiendo, ESCRITORA, y quiero que la próxima entrada sea divertida, te lo dice tu hermana mayor, y a las hermanas mayores se les hace caso jejeje.
Te mando un beso muy grande.

Anónimo dijo...

Si te hundes o te deprimes ellos o ellas ganan...Lola. No lo olvides.
Tú eres escritora porque lo serías aunque no hubieras ganado ningún premio ni hubieras publicado una novela...porque escritor se nace, digan lo que digan las escuelas de escritura creativa... tú eres una escritora imaginativa, con mucha agilidad, capacidad narrativa excelente, ganas de contar cosas ENTUSIASMO, imaginación... y sobre todo un corazón como un camión de grande en el que mojar la tinta de tus ficciones.

Yo también estou jodido últimamente por temas parecidos pero me permito que nadie me eche abajo o me deprima. Yo soy mucho más grande y más fuerte que ellos.

La Bruja de Clarà dijo...

Gracias por preocuparos por mí. ¡¡¡Ay, si es que tengo unos amigos que no me los merezco!!! No es nada, un calentón, de vez en cuando una necesita desahogarse. Me habéis subido la moral, sois los mejores. ¡¡¡Os quiero!!!
Por cierto, me preocupa más ser buena persona que buena escritora y si una persona se define también por sus amigos, esta noche dormiré muy tranquila. Besos

Blanca Miosi dijo...

Hola Brujita, ¿qué es eso de embarrarse en una discusión con alquien que no lo merece? Si tú estás segura de ti, es suficiente.
Ya sabes que esa otra persona a quien creíste un amigo, no lo es. Y no porque te diga que no sabes escribir, sino porque actúa de mala fe.
Tranquila, no vale la pena perder los estribos por gente mediocre. Él sabe quién es y sabe quién eres tú. Eso es lo importante

Un beso,
Blanca

La Bruja de Clarà dijo...

Hola, Blanca, gracias por tus palabras. No discuto por estas cosas pero reconozco que necesitaba sacarme la espina y la mejor manera que conozco es esta, escribiendo, este es mi exorcismo. Cierto, sé quién soy, no necesito que vengan a decírmelo pero me duelen determinadas actitudes y esta me dolió. Pero no pasa nada, yo sigo mi camino aplicando aquello de pasar por la vida haciendo el mínimo de mal posible y el máximo de bien. Duermo tranquila por las noches y eso es lo único que deseo. En cuanto a los demás... pues allá cada uno con su conciencia. Sólo el tiempo dirá, como siempre. Yo no puedo quejarme de mi suerte, ya lo he dicho, ni deseo la de los demás. Mis logros son míos aunque sean modestos y sólo a mí me he de demostrar las cosas, a nadie más.
De nuevo gracias por tus palabras. Por suerte hay mucha más gente como tú, MJesús, Mc y tantos y tantos otros que practicamos el buen rollo que como los otros... aunque haberlos "haylos" je je je